THE LAST OF US PART II - LA CONTINUACIÓN QUE NADIE PIDIÓ

Empecemos por el principio. En el año 2013 yo era apenas un joven preparatoriano quien se pasaba día tras día en conseguir el siguiente prestigio de aquel entonces popular Moder Warfare 3. Para ese año, juegos como Mass Effect 3 y Halo 4 fueron de esos juegos que pasaron por mis manos, y que hoy en día recuerdo con cariño por lo que fue y no por lo que son. Así pues, en ese mismo año, juegos como Tomb Raider, Bioshock Infinite, GTA V y The Last Of Us fueron las joyas de la corona, quienes acapararon rápidamente la atención y que además supusieron la puesta en escena de formidables TRIPLES A que a día de hoy, cuesta creer que estos juegos aparecieron en el mismo año. Ahora bien, siendo usuario de Xbox, tuve la oportunidad de jugar tres de los 4 juegos antes mencionados, pero al no contar con Playstation 3, fue imposible para mi probar de primera mano el exclusivo de Sony. Afortunadamente, Youtube y su imparable expansión fue lo único que necesite para poder disfrutar (talvez no en carne y hueso) la historia de The Last Of Us, y valla que de entre el resto, aun sin jugarlo, fue la historia que más llamó mi atención. Su influencia en mi fue tal que cuando tuve la oportunidad, no dude en adquirir una Playstation 3 solo para jugar y experimentar de primera mano uno de los mejores juegos de la década. Así pues, es curioso como la historia se repite, de nueva cuenta, soy usuario de Xbox, y cuando se revelo la segunda parte de esta joya, lo único que pensé fue en que tenía que adquirir un Playstation 4 sí o sí. Postergue la compra hasta su lanzamiento casi dos años después del anunciamiento de este último, pero ahora que ya está con nosotros, no puedo negar que la compra y la espera han valido la pena. Es por eso que con tantos sentimientos a flor de pecho, me decidí hablar de uno de los juegos más esperados y controversiales de los últimos años.

Ha diferencia de una reseña de videojuegos convencional, en donde gran parte del análisis se centra es su jugabilidad, este escrito solo se centra en la experiencia audiovisual y mi apreciación a la hora de jugar el juego. Esto se debe en parte a que siendo una secuela, los controles me ha merecido similares por no decir idénticos, y poco tengo que decir de este apartado, salvo subrayar que si bien el juego cuenta con algunos cambios jugables como esquivar, saltar o crear nuevos ítems, en perspectiva, el gameplay es básicamente igual a su antecesor. Dicho lo dicho, y habiendo terminado The Last Of Us Part II, sin temor a las críticas, este juego me ha encantado.

Siendo honesto, recién cuando se liberaron las críticas y análisis por parte de la prensa, ya me suponía que el juego tendría puntuaciones por encima del 9, y aunque es injusto valorar un juego con una calificación, tampoco podemos obviar el hecho de que el número ejemplifica a la perfección la percepción general del medio. Traigo a colación esto porque si bien la prensa y los medios hablaron en su mayoría de forma positiva del juego antes del lanzamiento, a pocos días de su estreno la lluvia de críticas negativas por parte de los usuarios no se han hecho esperar, es increíble y por primera vez en mucho tiempo, un exclusivo de Sony ha llenado de bilis y hate el internet a niveles que solo podría comparar con el aquel exclusivo de hace unos años llamado The Order 1886. Las observaciones son numerosas y abundan una gran cantidad de influencers que han utilizado discursos de desprestigio y decepción a un nivel que raya en el odio irracional. Tampoco me mal entiendan, son en estas ocasiones en que como persona trato de ponderar tanto las cosas positivas como las negativas, no quiero ser el defensor de las causas perdidas, y en definitiva, The Last Of US Part II me ha motivado a sincerarme y hablar sobre lo bueno y lo malo del título, pero sin llegar a equivocarme, solo puedo vislumbrar dos grandes problemas que aquejan este título, por un lado la publicidad engañosa y por el otro las altas expectativas que generó la espera a lo largo de los años.

No me quiero demorar demasiado, y para este punto, la historia de The Last Of US Part II es una muy arriesgada, no por lo que intenta contar, sino por lo que trae de regreso. Hace unos días conversaba con un amigo sobre las oportunidades perdidas, y ambos coincidimos en que si bien, fue sumamente emocionante volver a ver Joel y a Ellie en aquel tráiler del 2017, ambos discutimos sobre la importancia de verlos de regreso en una segunda entrega y la dinámica que habría entre ellos durante la experiencia, y aunque ambos coindicemos en que era algo que ansiamos ver, ¿Qué tan difícil era enfocarse en unos personajes completamente nuevos?. Después de todo, parte de la magia de la primera entrega era el mundo desolado y derruido por paso del tiempo, y talvez seguir a nuevos individuos hubiese sido algo que pudiese haber sido una bocanada de aire fresco para una historia que en mi opinión, daría punto final para las desventuras de Joel y Ellie. Esto que les digo realmente paso, y cuando vimos un adelanto en la Paris Games Week realmente pensé que la apuesta iría en esa dirección, a continuar expandiendo el universo con nuevos arcos y subtramas donde la intervención de Ellie y Joel pasaría a segundo plano. Pero todo esto al final se quedó en lo anecdótico, porque The Last Of US Part II es una realidad, y al final es lo que es, ¿y que tenemos?

Desde la introducción de aquel tráiler gameplay ya podíamos suponer parte importante de la trama. En mi nebulosa lo único que mi mente podía relacionar entre lo que sabía y lo que suponía, mis más sensatas teorías eran que la historia se torcería con algún asesinato o perdida que afectara de forma dramática a Ellie, hasta dar con los responsables. Dina me parecía por mucho la opción más lógica, siendo pareja sentimental de Ellie, y una justificación más que obvia para dar rienda suelta a la historia de venganza que Naugthy Dog nos estaba vendiendo. Ahora bien, con lo maniático que me he vuelto desde la muerte Ned Stark, cada vez que veo algún contenido dramático, mi primer pensamiento es que alguien va a morir si o si porque es lo siempre pasa en esta nueva ola historias donde el protagonista se vuelve un mártir y los fans solo estamos ahí para derramar el mar de lágrimas por ver a nuestro héroe caído. Me paso con STAR WARS, me paso con MARVEL y esperaba lo peor para The Last Of US Part II. En ese sentido, y viniendo del universo de The Last Of US, lo menos que esperaba era que muriera Tommy, pero transcurrido las 2 horas y viendo cómo se entrelazaban los hilos, en todo momento pensaba que Ellie seria capturada, que Dina trataría de salvarla y ella sería el daño colateral que estaba esperando, pero cuando llego el momento, y vi a Joel retorciéndose de dolor y como la tortura se convirtió en agonía, cuando las cosas se alinearon, el hecho de que Joel fuese quien muriese para dar inicio a la aventura fue la cosa más inesperada y desorientadora que pude imaginar. No es solo es que para ese momento todo lo que creía saber sobre el juego se desmorono, sino que además, la historia que vendría por delante sería una de genuina venganza. Talvez no era lo que esperaba, pero ya nada me detendría para llegar hasta el final.

En año 2015, antes del estreno de Halo 5 Guardians, recuerdo la incesante campaña publicitaria en donde por primera vez, el jefe maestro pasaría de ser el héroe que todos conocemos al villano y una figura al cual perseguir durante la campaña. Tendríamos que cazar y capturar al icónico Spartan y de paso averiguar sus motivaciones por las que había desertado. En papel sonaba increíble, una historia que cambiaría por completo la imagen de un personaje que durante años fue el héroe indiscutible de su historia, pero ¿Qué tuvimos la final?. Halo 5 Guardians me gusta, pero su campaña es la más floja desde la de Halo 3 ODST, aquella campaña publicitaria se vino abajo con una historia que no solo no era para nada a lo que se venía contando, sino que además el supuesto cambio de banderas nunca llego, el jefe maestro no es un ni un ruin ni antagonista, inclusive sus acciones son más que justificables, talvez como soldado habrá roto varios códigos y algún que otro estatuto militar, pero más allá de eso, seguía siendo el mismo de siempre. Aquel roce con el spartan Locke fue solo un pelea de camaradas, y al final las consecuencias de sus actos son irrelevantes para el argumento, la historia fue tan poco coherente con su premisa que para el final del juego, el jefe y Locke (el protagonista) no tienen nada el uno contra el otro y terminan por coincidir en ideas y motivaciones durante el epilogo del juego. Puedo entender el enojo con The Last Of Us Part II, pero en esta ocasión siento que la mentira jugo de forma positiva para redireccionar la historia y los sentimientos de los jugadores. Talvez no fue la mejor opción, pero si una alternativa a este mundo donde los spoilers abundan y poco se puede hacer cuando se filtran esta clase de información, el secretismo era algo de lo que esta segunda parte necesitaba para llegar a los estantes sin perder la magia de la primera vez. Ese secretismo no se quedó en la publicidad, a una semana antes del estreno los medios liberaron los análisis y reviews, y me parece sorprendente que nadie haya metido la pata con un juego de esta envergadura. Tal vez es por eso que actualmente el público no podría estar más dividió, entre aquellos que lo odian y aquellos lo defienden.

No es mi papel contrariar la postura de aquellos que no les pareció la experiencia, en mi opinión hay argumentos bastante sólidos, hay tramos muy largos sin nada que hacer más que ser solo un espectador, la historia nos introduce numerosos enfrentamientos y justo cuando la adrenalina empieza a circular por las venas, la acción se interrumpe en pro de seguir contando la historia; Hay momentos que se sienten que solo están ahí para alargar aún más la trama, y en definitiva varios de los temas que trata de transmitir el titulo pueden verse socavados por su ritmo que a veces juega en su contra y rompe con su progresión. No es perfecto y eso ya nos ha quedado claro, pero tenido en cuenta lo ambicioso que es, The Last Of Us Part II es juego que aun dentro de su propia imperfección, sería injusto negar sus virtudes, y al menos en lo personal, el juego utiliza la violencia como el único vínculo que tiene entre él y el jugador, y en esto último, creo que logra más de lo uno pudiese pensar.

Para esto, la primera entrega funcionaba porque gracias a su diseño, el juego nos presentaba un mundo derruido y caótico, en el que solo él solo el más fuerte sobrevive, y su uso de la violencia nos transportaba de lleno para ser partícipes de su brutalidad. En mi caso, durante las secuencias de acción, era común que intentara pasar de largo de los enemigos, o si no había de otra, llamar lo menos la atención para pasar sin consumir la menor cantidad de recursos posibles. Siendo técnicos, el juego nunca te dejaba abajo con recursos para continuar, pero esa sensación de nunca tener todo lo que necesitas permea en cada enfrentamiento, y la sensación de que en cualquier momento pudieses cagarla desperdiciando alguna bala o consumir todos tus botiquines desarrollaban momentos de mucha tensión, es por eso que la violencia y su tratamiento de cierta forma jugaba a su favor como una forma de descarga momentánea de esa tensión del jugador en aras de un espectáculo ruin y sanguinario que representaba eliminar a los enemigos en la primera entrega. El juego era violento, pero su crudeza funcionaba de tal forma que era fácil seguirle el juego y meternos de lleno en la historia que trataba de contar. La primera entrega hablaba sobre las heridas del pasado y la búsqueda por encontrar una razón para vivir, en ella, a pesar de que Ellie se llevaba las miradas de todos al ser un personaje lleno de vida con tantas preguntas en un mundo que la superaba, nosotros controlábamos a Joel, un hombre que lidiaba con sus emociones y que se negaba a sentir algo de nuevo por temor a volver a ser lastimado. Pero para la segunda entrega, la historia que nos narra Neil Druckmann utiliza la misma violencia del primer juego no como una representación del mundo y sus peligros, si como un catalizador por donde redirigir la ira y la furia que Ellie siente tras la perdida de Joel. En el primer juego, para cuando Ellie es llevada a el quirófano para su cirugía de la cual nunca volverá, Joel sucumbe ante sus sentimientos, estos son profundos e intensos, y saber que perderá Ellie como perdió a Sara (su hija), ese hecho lo vuelve un animal rabioso y poco le importa asesinar a 10 o a 50 hombres sin con ello logra salvarle la vida a Ellie, lo más importante de aquel momento, es que como jugadores nosotros controlamos a Joel, somos nosotros quienes jalamos el gatillo, es curioso que cómo la conexión que hemos formado con Ellie a lo largo de la historia nos rebaja y nos sitúa como una persona desesperada incapaz de poder hacer algo, aquellas soldados que matamos no son personas, son obstáculos, y cuando logramos salvar a Ellie, lo que menos pensamos es en la pila de cadáveres que se fueron acumulando mientras tratábamos de conseguir la meta. The Last Of Us Part II sufre de algo parecido, para cuando Joel es asesinado, aquellas figuras quienes lo masacraron pasan de ser personas a objetivos y durante toda la primera parte del juego lo único que pesaba es que sin importar que, aquellos quienes estuvieron involucrados la pagarían y caro.

Sin embargo, conforme avanza la aventura es evidente la mano del guionista porque miremos más allá y nos situemos en determinados puntos sin por ello obviar el aquí y en el ahora. Avanzada la trama, Ellie este cociente del embarazo de Dina, sabe que esta poniendo en peligro a Jesse y obviamente no está en Seattle por recuperar Tommy, Ellie quiere su venganza a toda costa, y como jugadores pasamos de todo lo anterior porque no podemos ni queremos negársela. Aquellos flashbacks que aparecen de forma inesperada, en lo personal fueron una montaña rusa de emociones, sé que el ritmo del juego jugaba en su contra, pero ver nuevo a Joel y descubrir lo que ocurrió en la relación entre estos dos personajes después de los eventos del primer juego, solo acrecentaba esa sensación de que su final no solo fue caótico, violento e inmerecido, sino que además, nos revela la frustración de Ellie por no haber hecho las pases con un hombre al que consideraba un padre para ella. El juego es tan bizarro que llegado el momento, es innegable pensar que todo cuanto Ellie ha hecho, talvez no lo valga, haber asesinado a una mujer embarazada debería ser más que suficiente, debería bastar, hemos llegado demasiado lejos ¿no?, y entonces aparece Abby.

The Last Of Us Part II es largo y sin duda a habido miles que no les a gustado el hecho, es un juego tenso y para la hora doce uno empieza a cansarse, y volver a repasar los hechos desde la perspectiva de Abby es una decisión que sin duda es controvertida, después de todo, ella es la villana ¿no?. He visto muchas criticas sobre la campaña de Abby y lo aburrido que llega a tornarse el juego, que es innecesaria y que si la gente tiene la iniciativa de seguir es por el corte tan abrupto entre el final de la campaña de Ellie y el inicio de la de Abby. Sin irme tan lejos, yo también sentí aquella desconexión con el personaje, para mi con su prologo era mas que suficiente, ya conocía sus motivaciones, Joel asesino a su padre, punto, pero siguiendo esa mentalidad sin duda se ven opacados matices, y en eso su campaña invita a profundizar y reflexionar.

No solo es el hecho de que conozcamos otra perspectiva de los hechos, si no que también nos relacionamos con aquellos que estuvieron involucrados. Desde que vi aquel hombre escupir en el cuerpo sin vida de Joel sabia que disfrutaría verlo morir, pero pasa y resulta que es nada mas y nada menos que Manny, no es como que sea muy relevante pero durante el poco tiempo que estas con él, sabes que una personaje divertido, confiable, y un verdadero amigo, es a todas luces una buena persona y un buen hijo, y verlo morir es repentito y sanguinario. Ni siquiera te da tiempo de digerirlo, es tan rápido que cuando descubre que fue el mismísimo Tommy quien lo hizo, no dudas en pensar en qué que hijo de puta el desgraciado éste. Para que me entiendan, la vara con la que mediamos al inicio cambia de forma radical para la segunda mitad del juego, sabes que el grupo de Abby es culpable del crimen pero tampoco son malas personas. Son mas que sobrevivientes en un mundo donde primero disparas y luego preguntas.

Abby no se arrepiente de haber asesinado a Joel pero no significa que se siente mejor con el hecho, su culpa es tal que hasta la misma Mel le recrimina sus actos, talvez Joel se lo merecía pero matarlo no la hace mejor persona, y es aquí cuando conoce a Yara y Lev. Si la campaña de Ellie va sobre la venganza, la campaña de Abby habla sobre las consecuencias de la venganza y la búsqueda de la redención. A ojos de Yara y Lev, Abby es un agente de cambio que impulsa a estos dos a seguir adelante, Abby tiene una deuda con ellos pero en vez de pagarla y quedar a mano, esta se preocupa, cree que no nunca ha hecho nada bueno, y de repente son estos niños quienes le recuerdan que siempre hay una alternativa, que hay una mejor versión de ella, y en su afán por ayudar su viaje funge como especie peregrinación por el cual espiar sus pecados. Es turbulento y a ratos hasta demasiado para su propio bien, pero cuando salva por segunda ocasión a Lev, Abby ya no es ese monstruo que asesino a Joel, es una persona que trata de darse una segunda oportunidad a pasar de su pasado, por eso cuando tiene a Dina entre la vida y la muerte y Lev se interpone, Abby sabe que matarla no resolverá nada. Ellie ha matada a todos sus amigos y seres queridos, debería matarla y dejarla ahí como Ellie hizo con Owen y Mel, pero de que serviría si al final ya están muertos. Es por eso que el final es sumamente chocante, cuando Ellie y Abby se enfrentan una vez más, tomamos control de Ellie y somos participes de un enfrentamiento disparejo con diversos sentimientos, Abby mato a Joel y eso nadie lo puede negar, pero ella no pelea por venganza, sino para proteger a Lev, sin embargo Ellie no puede dejar las cosas así, no puede perdonar a Abby como tampoco puede olvidar el hecho de que Joel esta muerto. Es agobiante y por momentos solo quería que terminara, Abby no es una buena persona, pero ¿merece morir?, mato a Joel, sí, pero Joel mato a su padre, y Ellie asesino a sus amigos. Razones no le faltan para matar a Ellie, pero no lo desea, y cuando Ellie está a punto de darle muerte y completar así su venganza, esta la deja ir. ¿Qué sentido tuvo entonces? ¿de que sirvió todo este viaje?.

Durante el epilogo Ellie recuerda la última noche que tuvo con Joel, en aquella ocasión este le recrimina sobre su decisión de dejarla vivir durante su estadía con las luciérnagas, para ella su vida tenia un propósito y Joel se lo arrebato, quiere perdonarlo pero no sabe como y es aquí cuando uno lo entiende, matar a Abby no resolvería nada, no traería a Joel de regreso y para mala suerte de Ellie, su venganza aun completada no serviría de nada, porque ella aun no se perdona así misma, no es solo que Joel haya muerto, sino que además su culpabilidad por como quedaron las cosas con él es algo que nunca podrá cambiar, creyó talvez asesinando a todos se sentiría mejor con ella misma, pero al final termino por perderlo todo, y verla tocar la guitarra de Joel y fallar los acordes es una sensación que penetra y sucumbe el corazón. Durante el juego Ellie se toma tiempo para tocar y obsequiarnos momentos increíbles donde expresa y comparte su ser gracias a las enseñanzas de Joel, y final, ya ni eso puede hacer, su ultimo vinculo con Joel se ha ido, así que se va, se aleja, y lo único que queda es la guitarra con la que dio origen esta historia.

Durante semanas he visto y oído todo respecto a The Last Of Us Part II, es ambicioso y quiere ser un referente en los años venideros. Talvez no sea perfecto, y mucho de sus detractores los argumentos les sobran. La historia era una que no necesitábamos que nos contaran, pudimos haber vivir sin ella y recordar a la primera entrega como un producto innovador fruto de su tiempo que parco una pauta y sirvió como un referente en los años que le siguieron. Sin embargo, aquí estamos, en pleno 2020 jugando la segunda parte de uno de los juegos mas importantes de la década pasada. Pudo haber sido mejor, eso esta en tela de juicio, pero The Last Of Us Part II es una obra que invita a reflexionar, no será perfecta y en su afán por ser diferente y ambiciosa termino por resbalar con aquellos con quienes nunca pensó tropezar, sus fans. Por mi parte, el viaje fue duro, lleno de baches y momentos exhaustivos, pero prefiero mil veces el resultado final que muchos de los juegos de esta ultiman generación. Si Red Dead Redemption 2 fuera el crepúsculo de la generación, The Last Of US Part II es la oscuridad de la noche que se avecina para decir adiós y recordarnos que a pesar de todo, la noche es solo la invitación para dormir y soñar, soñar con grandes historias y nuevas travesías por experimentar y formar parte. Quien sabe como lo recordemos en el futuro, pero por ahora, para mi, este juego es lo mas sobresaliente de los últimos años y una experiencia imperdible.